
“La Valquiria Caribeña: Voces de la Economía Informal“
La ganancia monetaria puede ser un placer incomparable cuando se deriva de la pasión y no de la necesidad. En este proyecto, exploramos la historia de una mujer cuyo viaje comenzó a los siete años vendiendo plátanos en las calles de Los Palmitos, Sucre. Este camino, que comenzó como una lección impartida por el Sr. José de Jesús Suarez Garizao, se convirtió en un vínculo entre los deseos y la manifestación en la realidad.
Pocos podrían haber previsto que estas primeras experiencias la llevarían a vender en las calles de Maracaibo una década después, y finalmente, en 2023, a “vender” historias de mujeres que trabajan en el espacio público en Bogotá. Esta muestra, bajo el título “La Valquiria Caribeña,” sirve como una excusa artística para dar voz a las mujeres que son la columna vertebral de la economía informal.
La Valquiria Caribeña es una representación gráfica y sonora de un proceso de empoderamiento y reconocimiento. Abarca las diversas labores que esta mujer ha desempeñado a lo largo de su vida entre Colombia y Venezuela, junto con otras mujeres que han trabajado en el espacio público . El nombre de esta diosa rinde homenaje a la región del Caribe, abarcando desde el norte hasta el sur de ambos países, que comparten aguas, montañas, ríos, ciudades, y un poco de su identidad.
En su representación, La Valquiria Caribeña sostiene en una mano un micrófono, simbolizando el poder de su palabra y cómo esta se emplea para dar vida a sus propósitos y dar voz a las mujeres ignoradas o subestimadas debido a sus labores cotidianas. En la otra mano, sostiene un ramo compuesto por hojas de tabaco, ruda, eucalipto y flores. Estos elementos representan la unión entre los saberes místicos y su conexión con lo divino en el mundo terrenal.
Su vestido blanco, que se yuxtapone a la armadura, es un recordatorio de las múltiples capas de camuflaje que las mujeres despliegan para protegerse en su lucha diaria. Este conjunto es una representación visual de la compleja dualidad de la vida de las vendedoras informales en el espacio público, donde la resistencia y la resiliencia se entrelazan con la esencia misma de la supervivencia.
A través de “La Valquiria Caribeña,” se nos invita a reflexionar sobre el poder del arte como medio para dar voz a las voces silenciadas, para reconocer las labores que a menudo pasan desapercibidas y para celebrar la fuerza, la diversidad y la vitalidad de las mujeres que dan vida a las calles de nuestras ciudades.
Zoila Silena Arias
Directora de Ojo de Valquiria.

